Nicolás Maquiavelo: Sus frases

«El que es elegido príncipe con el favor popular debe conservar al pueblo como amigo.»
Maquiavelo

En recuerdo al político, diplomático, poeta e historiador florentino en el aniversario de su nacimiento.

Nicolás Maquiavelo

Sus frases:

Cuando se conquista por segunda vez un país que se había rebelado anteriormente es más difícil volverlo a perder.

Divide para reinar.

Dios no quiere hacerlo todo, para no quitaros el libre albedrío y aquella parte de la gloria que os corresponde.

El mal se hace todo junto y el bien se administra de a poco.

El que quiere ser tirano y no mata a Bruto y el que quiere establecer un Estado libre y no mata a los hijos de Bruto, sólo por breve tiempo conservará su obra.

En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven.

En todas las cosas humanas, cuando se examinan de cerca, se demuestra que no pueden apartarse los obstáculos sin que de ellos surjan otros.

Es imposible que los que mandan sean reverenciados por los que desprecian a Dios.

La experiencia siempre ha demostrado que jamás suceden bien las cosas cuando dependen de muchos.

La habilidad y la constancia son las armas de la debilidad.

La liberalidad se devora a sí misma, pues a fuerza de ejercerse se agota.

La naturaleza de los hombres soberbios y viles es mostrarse insolentes en la prosperidad y abyectos y humildes en la adversidad.

Las armas se deben reservar para el último lugar, donde y cuando los otros medios no basten.

Los hombres en general juzgan más por los ojos que por las manos; porque el ver pertenece a todos, y el tocar a pocos. . . El vulgo se deja siempre coger por las apariencias. . . Y en el mundo no hay sino vulgo.

Los hombres ofenden antes al que aman que al que temen.

Los hombres olvidan más fácilmente la muerte de su padre que la pérdida de su patrimonio.

Los hombres rara vez tienen el valor suficiente para ser o extremadamente buenos o extremadamente malos.

Los hombres son tan simples, y se someten hasta tal punto a las necesidades presentes, que quien engaña encontrará siempre quien se deje engañar.

Ninguna fuerza doma, ningún tiempo consume, ningún mérito iguala, el nombre de la libertad.

No puede haber grandes dificultades cuando abunda la buena voluntad.

Si el partido principal, sea el pueblo, el ejército o la nobleza, que os parece más útil y más conveniente para la conservación de vuestra dignidad está corrompido, debéis seguirle el humor y disculparlo. En tal caso, la honradez y la virtud son perniciosas.

Todos los Estados bien gobernados y todos los príncipes inteligentes han tenido cuidado de no reducir a la nobleza a la desesperación, ni al pueblo al descontento.

Todos ven lo que tú aparentas; pocos advierten lo que eres.

Vale más hacer y arrepentirse, que no hacer y arrepentirse.

Un príncipe. . . Jamás predica otra cosa que concordia y buena fe; y es enemigo acérrimo de ambas, ya que, si las hubiese observado, habría perdido más de una vez la fama y las tierras.

Yo no digo nunca lo que creo, ni creo nunca lo que digo, y si se me escapa alguna verdad de vez en cuando, la escondo entre tantas mentiras, que es difícil reconocerla

Nicolás Maquiavelo

Niccolò di Bernardo dei Machiavelli nació en Florencia, Italia, el 3 de mayo de 1469.
Político, diplomático, poeta e historiador.
Considerado como el fundador de la filosofía política moderna y uno de sus principales exponentes.
Develó la naturaleza del poder en forma realista y desnuda.
Murió olvidado el 21 de junio de 1527, dejando un gran legado que tuvo más éxito siglos después que en la época en la que vivió; aunque él nunca quiso predecir el futuro, lo hizo mediante el estudio del presente.
Defendió la colectividad ante la individualidad y siempre dijo la dura y única verdad sobre la política y sus gobernantes.

La imagen es un detalle de la estatua de Nicolás Maquiavelo en la Galería de los Uffizzi de Florencia.

*Entrada publicada el 3 de mayo de 2013.  Ha sido ampliada con nuevas frases el 21 de junio de 2022.