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Robert Peake, «El Viejo»
Nació alrededor de 1551, en una familia procedente de Lincolnshire, activo durante el reinado Isabel I y el de Jacobo I.
Se le menciona como «El Viejo”, para distinguirlo de su hijo, el pintor y también comerciante de grabados, William Peake y de su nieto, Sir Robert Peake.
Entre 1590 y 1625 se especializó en retratos, que caracterizan su pintura, de cuerpo entero, y el fuerte coloreado de ropas y accesorios, únicos en la Inglaterra de esa época.
Junto a De Critz, Marcus Gheeraerts el Joven, y el pintor de miniaturas Isaac Oliver, fue el único de origen inglés, de los cuatro cuyos talleres estuvieron íntimamente vinculados.
La autoría de las obras de Peake, De Critz, Gheeraerts y sus ayudantes sigue sometida a controversia en la actualidad.
En 1604 fue nombrado responsable de las pinturas a realizar del Príncipe Enrique Estuardo, sucesor al trono.
En 1607 designado, a la muerte de Leonard Fryer, “sargento-pintor” del rey Jacobo I, puesto que compartió con John De Critz, quien había ocupado el puesto desde 1603.
Tal función conllevó la elaboración de retratos originales y su copia como nuevas versiones, para regalar o enviar a cortes extranjeras, de igual manera que la copia y restauración de lienzos de otros pintores de la Royal Collection.
En 1610 se le designó “Pintor del Príncipe Enrique”, un príncipe de dieciséis años que ya reunía un salón literario en torno a su figura.
Tras la muerte del príncipe, en 1612, se trasladó al hogar del hermano de Enrique, Carlos, Duque de York, el que sería Carlos I de Inglaterra. En 1616, está documentado que Peake ra el pintor del heredero.
Peake murió en Londres, en octubre de 1619, su testamento se había consolidado el 10 de octubre , y legalizado el día 16 de ese mismo mes.
Se desconoce la fecha de su entierro, porque el Gran Incendio de Londres destruyó los registros de su iglesia parroquial, St Sepulchre-without-Newgate.
Debido a la relación entre los diferentes talleres que trabajaban «en equipo» en la realización de retratos de la realeza inglesa, y que pocos pintores firmaban sus obras, la mayoría de las obras de Peake le son atribuidas en base al método de apuntar el año y la fecha del modelo en su representación.
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