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Octave Denis Victor Guillonnet
Nació en en París, el 22 de septiembre de 1872.
Fue decorador de palacios nacionales, diseñador, retratista e ilustrador.
Pertenecía a una familia de trabajadores del cuero, con ingresos modestos, gran parte de su infancia transcurrió en el departamento de Loiret, en Jargeau, lejos del bullicio de París.
Frágil de salud, fue acogido por sus abuelos maternos durante sus múltiples períodos de convalecencia.
Pasó muchas horas estudiando literatura, en paralelo a su formación artística, labrándose una gran cultura literaria, desarrollando muchas habilidades de escritura.
Fue extraordinariamente precoz como artista, con 13 años de edad, en 1886, expuso por primera vez en el Salón «Blanc et Noir» un retrato de Luis XI, Luis XI en oración.
Se formó inicialmente en el estudio de Lionel Royer, y más tarde fue aceptado en L’ Ecole Nationale des Beaux-Arts de París, en la que tuvo como maestro a Joseph Blanc, un pintor francés dedicado a temas religiosos y mitológicos y pintor de historia. También recibió clases de Fernand Cormon.
Su estilo inicial fue simbolista, con conexiones de otro mundo a escenas de playa de ensueño o figuras en un jardín.
En 1887, su obra se expuso en el Salon des Artistes Français. A los 17 años obtuvo una mención de honor en el Salón de 1890, una mención de tercera clase en 1892 y una mención de segunda clase en el Salón de 1894.
En 1896 realizó un viaje de estudios gracias a una beca para descubrir los colores de Oriente., que le permitió pintar en suelo argelino. Tras este paso por el norte de África, su visión de la luz quedó especialmente impactada, aunque previamente fue influenciado por la paleta de los impresionistas, ésta se volvió más viva, más intensa.
A su regreso participó en la Exposición Universal de 1900 de París, durante la cual recibió el encargo de realizar una decoración monumental para el pabellón del Ministerio de Colonias. Su obra L’Asie, l’Afrique et l’Amérique recibiría una medalla de plata.
En 1913 fue elegido por Léon Bonnat, director de L’ Ecole Nationale des Beaux-Arts de París, para ilustrar la cartulina del banquete y concierto ofrecido para elevar a Cormon a comandante de la Legión de Honor.
En ese tiempo pintó «La huida de Caín», Cormon ocupa el lugar central en este cuadro.
Gradualmente su trabajo se hizo más y más famoso y cotizado, exhibió junto a Claude Monet y Alfred Sisley en París en la galería de Georges Petit, el gran rival de Durand-Ruel y una de las figuras más influyentes en el mercado del arte de la época.
Se convirtió en Pintor Oficial de la Tercera República, y su formación clásica y buenas conexiones le ayudaron a obtener muchos encargos de trabajo, a menudo de gran formato.
Además de los lucrativos encargos de retratos, muchas de sus pinturas importantes fueron para el Hotel de Ville de París, cuarenta y seis paneles para el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela en Caracas y las Estaciones de la Cruz en Filadelfia.
Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, en 1914, se vio obligado a abandonar su pueblo y optó por refugiarse en el sur de Francia. Su trabajo tomó un rumbo diferente.
El «pintor oficial» de la Tercera República, abandonaría esta pintura de historia en favor de una pintura más luminosa y ligera, en la que vemos cuerpos femeninos desnudos, lánguidos, envueltos en largas estolas de colores.
Aproximadamente en 1915, su estilo giró hacia el postimpresionismo, más estrictamente descriptivo, en el que, sobre todo representó figuras en jardines.
Esta ruptura con la estética de su obra vino marcada por el abandono de su firma en favor de un nuevo seudónimo: ODV, seguido de las tres primeras letras de su nombre de pila GUI.
Es a este último período artístico que pertenece esta armoniosa pintura, que representa a un grupo de cuatro mujeres bañándose en una fuente en un entorno arquitectónico. Encontramos en él las características de su obra.
Los colores monocromáticos azulados, los contornos difuminados y fundidos, los grandes velos vaporosos, los cuerpos desnudos de muchachas jóvenes en la flor de la vida, y los matices brillantes pero suaves.
Fue nombrado oficial de la Legión de Honor.
Entre sus ilustraciones destacan «La Mule du Pape», de 1909 y L’Arlésienne (La muchacha de Arlés), de 1911, de Alphonse Daudet; Jeanne d’Arc (Juana de Arco), en 1912, de F. Funck-Brentano; y Rolla en 1912, de Alfred de Musset.
Murió en Montgeron, el 25 de septiembre de 1967.
Su pintura está representada, entre otros muchos, en el Museo de Arte Moderno de París, los Museos de Luxemburgo, Burdeos, Dijon y Nantes.
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