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Pintor ruso que con una fuerza realmente importante, nos transmite la magia de su arte con esos niños y juguetes cargados de ternura y de expresividad.
Sus pinturas, están tejidas con las experiencias de la vida real, y logran despertar la imaginación de cualquier tipo de espectador. Se trata de un artista adulto, maduro, que conserva corazón y alma de niño.
Nació en Kensal Green, Londres, el 23 febrero de 1844.
Pintor de género, nieto de William Mulready, que plasmó en su pintura, fundamentalmente escenas de la calle con niños mendigos y vendedoras de flores. Continue Reading…
«… Deja el duro marfil de mi cabeza
apiádate de mi, ¡rompe mi duelo!
¡que soy amor, que soy naturaleza!»
Tengo miedo a perder la maravilla
de tus ojos de estatua, y el acento Continue Reading…
a serenar la sien del pensamiento
que desahoga en mí su eterno rayo.»
En esta semana en la que se cumplen los 70 años de la muerte de Miguel Hernández, de su vil asesinato en la cárcel de Alicante, víctima de la represión del genocida Franco, otro de sus más bellos poemas para honrar su memoria, y su recuerdo siempre vivo.
Alto soy de mirar a las palmeras,
rudo de convivir con las montañas…
Yo me vi bajo y blando en las aceras
de una ciudad espléndida de arañas.
Difíciles barrancos de escaleras,
calladas cataratas de ascensores,
¡qué impresión de vacío!,
ocupaban el puesto de mis flores,
los aires de mis aires y mi río.
En el miembro desnudo de una rama,
se le ve al ave el trino
recóndito, desnudo.
MH
Quiero dedicarles esta entrada en el blog a dos personas a las que quiero mucho y que aman tanto como yo la poesía, y todo lo que Miguel Hernández significa: Nuria Soriano y Pedro Luis Angosto.
Miguel siempre con nosotros, pero especialmente recordado en el 70 aniversario de su muerte, víctima de la brutal represión de la dictadura franquista.
Del monte en la ladera
Fray Luis
Paraíso local, creación postrera,
si breve de mi casa; Continue Reading…
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Philip Andreyevich Maliavin nació en Kazanki, provincia de Samara, Rusia, en 1869, en un pueblo, en el que casi ninguno de sus habitantes sabía leer; pero por él pasaban monjes provenientes del Monte Athos e impresionaron al pequeño Philip con sus iconos, en contra de la oposición inicial de sus padres, marchó como novicio al Monasterio de San Pantaleón, donde permaneció recluido como novicio, de 1885 a 1891, aprendiendo la tecnica y trabajando en la realización de iconos. Se conservan muy pocos de estos trabajos.
En 1892, ingresa en la Academia de las Artes en San Petersburgo y en 1894 en el Instituto de Ilya Repin, donde completa su formación artística y en el que realizó sus mejores obras.
