«Yo amaba el desierto, los huertos quemados, las tiendas marchitas, las bebidas templadas, Me arrastraba por apestosas callejuelas y, con los ojos cerrados, me ofrecía al sol, dios de fuego…»
AR
«Hambre»
Tierra y alguna china
Es todo cuanto deseo.
El aire también me lo como
Rocas, carbones, hierro.