Clic en la imagen para ver más obras
Bhupen Khakhar
Nació en Bombay, India en 1934.
Obtuvo una licenciatura en economía y trabajó la mayor parte de su vida como contable.
Practicó el dibujo, la pintura y la escritura con pasión, y la libertad, de un autodidacta. Admirador de Gandhi durante toda su vida, fue defensor de las clases bajas, rebelándose contra la visión de la India de Nehru, contra el «buen gusto» de las clases medias y contra el estilo de pintura modernista entonces popular entre muchas de las élites artísticas de la India, siendo recordado como un iconoclasta y un inconformista.
Fue uno de los artistas indios más reconocidos internacionalmente y la figura principal de la llamada Escuela de Baroda.
Expuso por primera vez de forma individual en su ciudad natal, en 1965.
Posteriormente mostró su obra, entre otras importantes ciudades, en París, Ámsterdam, Londres, Berlín y Nueva Delhi, obteniendo en todas las ocasiones críticas muy favorables y total aceptación del público.
Así mismo fue un reconocido escritor, con una narrativa tan peculiar y personal como su pintura.
Es evidente la asimilación del Pop Art y la estética kitsch en sus cuadros, que se trasluce de manera evidente en trabajos como los denominadas por el artista «series comerciales» entre ellas: Janata arreglando un reloj, Huelga en la fábrica o El Señor I.M. Shah, contable adjunto, todos de 1972.
En la década de 1970 se centró en un principio, en la expresión de la subjetividad para más tarde elaborar un género dedicado a la vida cotidiana en una ciudad provinciana.
Son así mismo frecuentes las representaciones de ceremonias religiosas.
A partir de la década de 1980, inicia sus escenas narrativas de intención subversiva que no había realizado en sus inicios, producto de su evolución, siendo una característica predominante en sus obras, a desempeñando un papel político dentro del ambiente artístico de la India.
En esta misma década, se hace patente su condición homosexual en sus pinturas, representándose como amante y como amado en muchas ocasiones y desarrollando una iconología sexual propia.
El cuadro No se puede complacer a todo el mundo, de 1981, parece estar enviando un mensaje claro.
Sus personajes crecen en tamaño, frente a sus representaciones minúsculas durante la década de los setenta, y pasan a ocupar el primer plano de sus composiciones como se aprecia en las obras Seva (1986) o Yayati (1987).
Su producción de la década de 1990, será mayoritariamente ejecutada en acuarela sobre papel, en los que vemos como acentúa aún más las diferencias de tamaños entre los personajes de un mismo cuadro.
En esta etapa, la luz que impregna en sus cuadros es llamativa, hasta que al caer enfermo de cáncer, retoma el óleo, con una temática oscura y cargada de crueldad.
En 2002 se llevo a cabo una exposición, con más de 60 cuadros suyos en el Museo Reina Sofía de Madrid.
Murió en Baroda, India, el 8 de agosto de 2003.
No Comments