Jorge Manrique: Diciendo qué cosa es amor

«…Yo so el que, por amaros,
estó, desque os conoscí,
sin Dios, y sin vos, y mí»

«Diciendo qué cosa es amor…»

Es amor fuerça tan fuerte
que fuerça toda razón;
una fuerça de tal suerte,
que todo seso convierte
en su fuerza y afición.
Una porfía forçosa
que no se puede vencer,
cuya fuerza porfiosa
hacemos más poderosa
queriéndonos defender.

Es placer en c’hay dolores,
dolores en c’hay alegría,
un pesar en c’hay dulzores,
un esfuerzo en c’hay temores,
temor en c’hay osadía.
Un plazer en c’hay enojos,
una gloria en c’hy pasión,
una fe en c’hay antojos,
fuerza que hacen los ojos
al seso y al coraçón.

Es una catividad,
sin parescer las prisiones,
un robo de libertad,
un forzar de voluntad
donde no valen razones.
Una sospecha celosa
causada por el querer,
una rabia deseosa
que no sabe qu’es la cosa
que desea tanto ver.

Es un modo de locura
con las mudanzas que hace:
una vez pone tristura,
otra vez causa folgura,
como lo quiere y lo plaze.
Un deseo que al ausente
trabaja, pena y fatiga;
un recelo que al presente
hace callar lo que siente,
temiendo pena que diga.

Cabo

Todas estas propiedades
tiene el verdadero amor.
El falso, mil falsedades,
mil mentiras, mil maldades
como fengido traidor.
El toque para probar
cuál amor es bien forjado,
es sufrir el desamar,
que no puede comportar
el falso sobredorado.

Jorge Manrique

Nació en 1440, el lugar no se sabe con exactitud, pudo ser en si Paredes de Nava, Palencia, o en Segura de la Sierra, Jaén.
Pertenece al Pre-renacimiento español y es uno de los clásicos más importantes de la literatura española de todos los tiempos.
Su obra, que no es vasta, son apenas 40 composiciones poéticas, se clasifica en tres grupos diferenciados: el amoroso, el burlesco y el doctrinal. En general cultiva la sátira y el tema amoroso convencional, dentro de cánones de cancionero costumbrista. Destaca de todas ellas sin alguna duda, la más famosa de todas: «Las coplas por la muerte de su padre», en las que honra a su progenitor Don Rodrigo Manrique, mostrándonoslo como modelo de heroísmo, de virtudes y sobre todo de serenidad en la hora de su muerte. Felix Lope de Vega dijo de ella que «merecía estar escrita con letras de oro.»
Murió en Santa María del Campo Rus, Cuenca, el 24 de abril de 1479.

También de Jorge Manrique en este blog:

«Jorge Manrique: Coplas por la muerte de su padre»: AQUÍ

«Jorge Manrique: Estando, triste, seguro…»: AQUÍ

*La imagen es el monumento a Jorge Manrique en Paredes de Nava