Francis Bacon: Figura y expresión aterradoras

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Francis Bacon

Nació en Dublín, Irlanda, el 28 de octubre, de 1909.
Expresionista figurativo, desarrolló un estilo absolutamente personal e inconfundible.


Aunque nacido en Irlanda se crio y realizó la mayor parte de su obra en Inglaterra.

Su vida estuvo llena de dificultades familiares, con solo dieciséis años, tuvo que abandonar el hogar familiar tras conocerse su homosexualidad.

Dio clases de dibujo en la St. Martin School of Arts de Londres, y a partir de 1927 vivió entre París y en Berlín, ciudad ésta última, en la que comenzó a trabajar decorando interiores y  a pintando cuadros.

Durante un tiempo residió en Chantilly, tiempo en el que conoció y se entusiasmó con el cuadro «La masacre de los inocentes» de Nicolás Poussin, que se conserva en dicha localidad, este cuadro le inspiraría un buen número de obras.

Sin embargo, su mayor influencia le vino tras una visita a una exposición de Pablo Picasso, en París manifestó:  «Aquellos pierrots, desnudos, paisajes y escenarios me impresionaron mucho, y después pensé que quizá yo también podría pintar».

En 1929, a su regreso a Londres, de forma autodidacta comenzó a pintar óleo.

Sin embargo el éxito no llegaba,  y al cumplir 35 años, dado su fuerte carácter, destruyó casi todos sus cuadros.

En 1944 cuando finalizó el tríptico «Three Studies for Figures at the Base of a Crucifixion», ganó la aceptación del público y fue recibido muy bien por la crítica, esta pintura, fue considerada como uno de los cuadros más originales en el arte del siglo XX.

A finales de la década de 1940 empezó a conformar su estilo más personal.

En 1949, el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), compró una obra suya.

En este mismo año comienza la serie de versiones sobre el «Retrato de Inocencio X de Diego Velázquez» (Original en el Palazzo Doria-Pamphili de Roma), del que se conservan más de 40.

Se dice que pintó los cuadros, guiándose por fotografías, que no vio nunca el cuadro original, teniendo ocasión de hacerlo; aunque hay quien cree que tal afirmación sólo se trata de una anécdota, y que sí contempló el cuadro de Velázquez.

La mayor parte de sus pinturas, tienen una clara  influencia de la pintura de Edvar Munch, y en los trazos  las tonalidades la de Vincent Van Gogh; también se percibe cierta influencia de Francisco de Goya, en la angustia que transmite en sus cuadros.

Trabajó la representación de la figura masculina o femenina, que por lo general aparece de forma desfigurada e incluso de forma aterradora, en espacios cerrados y oscuros.

Murió en Madrid, el 28 de abril de 1992.
En el Museo Thyssen Bornemisza de Madrid podemos ver una de sus obras: «Retrato de George Dyer en un espejo» de 1963.

*Esta entrada fue publicada en este blog el 15 de diciembre de 2011. Ha sido actualizada y ampliada con nuevas obras, el 28 de abril de 2024.