Poesia

Fray Luis de León: De la Magdalena – Oda VI

enero 15, 2024


¿Qué vale cuanto vee,
do nace y do se pone, el sol luciente,
lo que el Indio posee,
lo que da el claro Oriente
con todo lo que afana la vil gente?…

FLL

Recordamos hoy el aniversario del poeta y humanista, en el aniversario de su nacimiento.

«De la Magdalena»

Oda VI

Elisa, ya el preciado
cabello, que del oro escarnio hacía,
la nieve ha variado;
¡ay! ¿yo no te decía:
—Recoge, Elisa, el pie, que vuela el día?

Ya los que prometían
durar en tu servicio eternamente,
ingratos se desvían
por no mirar la frente
con rugas afeada, el negro diente.

¿Qué tienes del pasado
tiempo sino dolor? ¿cuál es el fruto
que tu labor te ha dado,
si no es tristeza y luto,
y el alma hecha sierva a vicio bruto?

¿Qué fe te guarda el vano,
por quien tú no guardaste la debida
a tu bien soberano,
por quien mal proveída
perdiste de tu seno la querida

prenda, por quien velaste,
por quien ardiste en celos, por quien uno
el cielo fatigaste
con gemido importuno,
por quien nunca tuviste acuerdo alguno

de ti mesma? Y agora,
rico de tus despojos, más ligero
que el ave, huye, adora
a Lida el lisonjero;
tú quedas entregada al dolor fiero.

¡Oh cuánto mejor fuera
el don de hermosura, que del cielo
te vino, a cuyo era
habello dado en velo
santo, guardado bien del polvo y suelo!

Mas hora no hay tardía,
tanto nos es el cielo piadoso,
mientras que dura el día;
el pecho hervoroso
en breve del dolor saca reposo;

que la gentil señora
de Mágdalo, bien que perdidamente
dañada, en breve hora
con el amor ferviente
las llamas apagó del fuego ardiente,

las llamas del malvado
amor con otro amor más encendido;
y consiguió el estado,
que no fue concedido
al huésped arrogante en bien fingido.

De amor guiada, y pena,
penetra el techo estraño, y atrevida
ofrécese a la ajena
presencia, y sabia olvida
el ojo mofador; buscó la vida;

y, toda derrocada
a los divinos pies que la traían,
lo que la en sí fiada
gente olvidado habían,
sus manos, boca y ojos lo hacían.

Lavaba larga en lloro
al que su torpe mal lavando estaba;
limpiaba con el oro,
que la cabeza ornaba,
a su limpieza, y paz a su paz daba.

Decía: «Solo amparo
de la miseria extrema, medicina
de mi salud, reparo
de tanto mal, inclina
aqueste cieno tu piedad divina.

¡Ay! ¿Qué podrá ofrecerte
quien todo lo perdió? aquestas manos
osadas de ofenderte,
aquestos ojos vanos
te ofrezco, y estos labios tan profanos.

Lo que sudó en tu ofensa
trabaje en tu servicio, y de mis males
proceda mi defensa;
mis ojos, dos mortales
fraguas, dos fuentes sean manantiales.

Bañen tus pies mis ojos,
límpienlos mis cabellos; de tormento
mi boca, y red de enojos,
les dé besos sin cuento;
y lo que me condena te presento:

preséntate un sujeto
tan mortalmente herido, cual conviene,
do un médico perfeto
de cuanto saber tiene
dé muestra, que por siglos mil resuene.»

Fray Luis de León

Fray Luis de León nació en Belmonte, Cuenca, el 15 de agosto de 1527.
Fue un poeta, humanista y religioso agustino español de la Escuela salmantina.
Está considerado como uno de los escritores más importantes de la segunda fase del Renacimiento español junto con Francisco de Aldana, Alonso de Ercilla, Fernando de Herrera y San Juan de la Cruz.
Los temas morales y ascéticos dominan toda su obra.
Las envidias y rencillas entre órdenes y las denuncias del catedrático de griego, León de Castro, entre otros profesores, le llevaron a las cárceles de la Inquisición bajo la acusación de preferir el texto hebreo del Antiguo Testamento a la versión latina (la traducción Vulgata de San Jerónimo) adoptada por el Concilio de Trento, lo cual era cierto, y de haber traducido partes de la Biblia, en concreto el Cantar de los Cantares, a la lengua vulgar, cosa expresamente prohibida también por el reciente concilio y que sólo se permitía en forma de paráfrasis.
Aunque era inocente de tales acusaciones, su prolija defensa alargó el proceso, que se demoró cinco largos años, tras los cuales fue finalmente absuelto. Parece cierto que se le puede atribuir la décima que presuntamente, al salir de la cárcel, escribió en sus paredes:

«Aquí la envidia y mentira
me tuvieron encerrado.
¡Dichoso el humilde estado
del sabio que se retira
de aqueste mundo malvado,
y, con pobre mesa y casa,
en el campo deleitoso,
con sólo Dios se compasa
y a solas su vida pasa,
ni envidiado, ni envidioso!»

Tras salir de la cárcel, regresó a dictar su cátedra.
Murió en Madrigal de las Altas Torres, Ávila, el 23 de agosto de 1591, cuando preparaba una biografía de Santa Teresa de Jesús, cuyos escritos había revisado para la publicación y a la que admiraba profundamente.
Sus restos mortales fueron trasladados a Salamanca, siendo enterrado en su Universidad.

«…recíbeme en tu cumbre,
recíbeme, que huyo perseguido
la errada muchedumbre,
el trabajar perdido,
la falsa paz, el mal no merecido…»

También de Fray Luis de León en este blog:

«Fray Luis de León: Vida retirada»: AQUÍ

«Fray Luis de León: Después que no descubren su lucero…»: AQUÍ

«Fray Luis de León: Noche Serena – Oda VIII»: AQUÍ

«Fray Luis de León: Contra un juez avaro»: AQUÍ

«Fray Luis de León: De la Magdalena – Oda VI»: AQUÍ</a

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No Comments

  • Reply Bitacoras.com agosto 15, 2014 at 1:36 am

    Información Bitacoras.com

    Valora en Bitacoras.com: “¿Qué vale cuanto vee, do nace y do se pone, el sol luciente, lo que el Indio posee, lo que da el claro Oriente con todo lo que afana la vil gente?…” FLL Recordamos hoy el aniversario del poeta y humanista, en el aniv…

  • Reply Diego Jesús Jiménez: Coro de Ánimas | Trianarts noviembre 25, 2014 at 8:24 pm

    […] entre otros muchos galardones: El Premio Adonais por “La ciudad”, en 1964. El Premio Fray Luis de León de Poesía y el Premio Nacional de Poesía en 1997 por “Itinerario para náufragos”. Como pintor […]

  • Reply Recordando a Fray Luis de León: Noche Serena - Oda VIII - Trianarts agosto 15, 2015 at 10:07 pm

    […] “Fray Luis de León: De la Magdalena – Oda VI”: AQUÍ […]

  • Reply Recordando a Diego Jesús Jiménez: Espacio para un sueño - Trianarts septiembre 12, 2015 at 11:29 pm

    […] entre otros muchos galardones: El Premio Adonais por “La ciudad”, en 1964. El Premio Fray Luis de León de Poesía y el Premio Nacional de Poesía en 1997 por “Itinerario para náufragos”. Como pintor […]

  • Reply Diego Jesús Jiménez: Color solo - Trianarts octubre 4, 2015 at 11:33 am

    […] entre otros muchos galardones: El Premio Adonais por “La ciudad”, en 1964. El Premio Fray Luis de León de Poesía y el Premio Nacional de Poesía en 1997 por “Itinerario para náufragos”. Como pintor […]

  • Reply Diego Jesús Jiménez: Ronda del hombre (I) - Trianarts diciembre 12, 2015 at 12:54 am

    […] entre otros muchos galardones: El Premio Adonais por “La ciudad”, en 1964. El Premio Fray Luis de León de Poesía y el Premio Nacional de Poesía en 1997 por “Itinerario para náufragos”. Como pintor […]

  • Reply Mi recuerdo a Diego Jesús Jiménez: Ronda de la noche (I) - Trianarts diciembre 24, 2015 at 12:05 am

    […] entre otros muchos galardones: El Premio Adonais por “La ciudad”, en 1964. El Premio Fray Luis de León de Poesía y el Premio Nacional de Poesía en 1997 por “Itinerario para náufragos”. Como pintor […]

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