Ramón de Campoamor: Frases

                                   Mi querida más fiel fue la esperanza
que me suele engañar y no me deja.
RC

Ramón de Campoamor

Algunas de sus mejores frases y ripios:

«La libertad no consiste en hacer lo que se quiere, sino en hacer lo que se debe.»

«Y es que en este mundo traidor, no hay verdad ni mentira: todo es según el cristal con que se mira.»

«No rechaces tus sueños. ¿Sin la ilusión el mundo qué sería?.»

«La vida es dulce o amarga; es corta o larga. ¿Qué importa? El que la goza la halla corta, y el que la sufre la halla larga.»

«La amistad es un amor que no se comunica por los sentidos.»

«Saben bien los amantes instruidos que quiere decir «sí» tres «no» seguidos.»

«Tened miedo de aquellas que eclipsan, siendo feas, a las bellas.»

«Es propio del amor si es verdadero, compendiar en un ser el mundo entero.»

«Es mi fe tan cumplida que adoro a Dios, aunque me dio la vida.»

«Les falta algo de amor a los amores que no son un infierno de dolores.»

«Yo voy a ti como va sorbido al mar ese río.»

Ramón de Campoamor

Ramón de Campoamor y Campoosorio nació en Navia (Asturias) el 24 de Septiembre de 1817.
Es sin duda uno de los máximos exponentes del Romanticismo español y quizá el representante más importante de la poesía asturiana.
A los 18 años ingresa en la Compañía de Jesús, vocación que abandona en poco tiempo y se matricula en la Facultad de Medicina de Madrid que también abandona; en dicha facultad uno de sus catedráticos le incita con vehemencia para que se dedique a la literatura y a los 20 años (1883), publica su primera obra «Una mujer generosa» comedia en dos actos que no llegó a estrenarse; también en este año se edita su primera obra poética: «Ternezas y flores»
En los años 40 se afilia al Partido Moderado en el que los militantes eran seguidores fervorosos de la Reina Isabel II y de la monarquía como forma de estado y en 1847 es nombrado gobernador civil de Castellón de la Plana y después de Alicante donde realiza importantes obras urbanísticas y de la que fue nombrado hijo adoptivo. En esa época se casa con Guillermina O’Gorman de procedencia irlandesa en la Ermita del Fabrequer de San Juan (Alicante).
En 1850 es elegido diputado en Cortes y es trasladado al Gobierno Civil de Valencia donde permanece hasta 1854.
En 1861 es nombrado Académico de la Lengua con el Sillón «E mayúscula». Fue senador en los últimos años de su vida.

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