«Qué pequeña eres brizna de hierba. Sí, pero tengo toda la Tierra a mis pies.»
RT
Mi recuerdo al Premio Nobel hindú en el aniversario de su nacimiento.
«Pájaros perdidos»
1
Pájaros perdidos de verano vienen a mi ventana, cantan,
y se van volando.
Y hojas amarillas de otoño, que no saben cantar,
aletean y caen en ella, en un suspiro.
2
Vagabundillos del universo, tropel de seres pequeñitos,
¡dejad la huella de vuestros pies en mis palabras!
3
Para quien lo sabe amar, el mundo se quita su careta de
infinito. Se hace tan pequeño como una canción, como un
beso de lo eterno.
4
Las lágrimas de la tierra le tienen siempre en flor
su sonrisa.
5
El desierto terrible arde todo por el amor de una yerbecita;
y ella le dice que no con la cabeza, y se ríe, y se va
volando…
6
Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán
ver las estrellas.
7
En tu camino, agua bailarina, la arena te pordiosea
tu canción y tu fuga.
¿No quieres tú cargarte con la coja?
8
Tu cara anhelante persigue mis sueños como la lluvia por
la noche.
9
Una vez, soñamos los dos que no nos conocíamos. Y nos
conocíamos. Y nos despertamos a ver si era verdad que nos
amábamos.
10
Como el anochecer entre los árboles silenciosos, mi pena,
callándose, callándose, se va haciendo paz en mi corazón.
11
No sé qué dedos invisibles sacan de mi corazón, como una
brisa ociosa, la música de las ondas.
12
-Mar, ¿qué estás hablando?
-Una pregunta eterna.
-Tú, cielo, ¿qué respondes?
-El eterno silencio.
13
¡Oye, corazón mío, los suspiros del mundo, que está
queriendo amarte!
14
El misterio de la vida es tan grande como la sombra en
la noche. La ilusión de la sabiduría es como la niebla del
amanecer.
15
No te dejes tu amor sobre el precipicio.
16
Me he sentado, esta mañana, en mi balcón, para ver el
mundo. Y él, caminante, se detiene un punto, me saluda y
se va.
17
Menudos pensamientos míos, ¡con qué rumor de hojas
suspiráis vuestra alegría en mi imaginación!
18
Tú no ves lo que eres, sino su sombra.
19
¡Qué necios estos deseos míos, Señor, que están turbando
con sus gritos sus canciones! ¡Haz Tú que solo sepa yo
escuchar!
20
No soy yo quien escoge lo mejor, que ello me escoge a mí.
21
Si me está negado el amor, ¿por qué, entonces, amanece;
¿por qué susurra el viento del sur entre las hojas recién nacidas?
Si me está negado el amor, ¿por qué, entonces,
la medianoche entristece con nostálgico silencio a las estrellas?
22
Sé que esta vida, aunque no madure el amor, no está perdida del todo.
23
¡No sea yo tan cobarde, Señor, que quiera tu misericordia en mi triunfo,
sino tu mano apretada en mi fracaso!
Rabindranath Tagore
Rabindranath Tagore (en bengalí: Ravindranatha Thakura), nació en Calcuta, el 7 de mayo de 1861.
Poeta bengalí y filósofo del Movimiento Brahmo Samaj, aunque más tarde se convertiría al hinduismo.
Dramaturgo, músico, novelista y autor de canciones, fue galardonado el Premio Nobel de Literatura en 1913, siendo en el primer asiático en obtener este galardón.
Escribió su primera obra a los 17 años
Extendió por el mundo el arte bengalí con un gran numero de poemas, relatos cortos, cartas, ensayos y pinturas.
Fue también un sabio y reformador cultural que modernizó el arte bengalí desafiando las severas críticas que hasta entonces lo vinculaban a unas formas clasicistas.
Dos de sus canciones son ahora los himnos nacionales de Bangladesh e India: el «Amar Shonar Bangla» y «Jana Gana Mana».
Estudió en Inglaterra la carrera de Derecho, regresando después a su país.
En 1915 fue nombrado caballero por Jorge V, rey británico, renunciando al título tras la Matanza de Amritsar en 1919, en la que tropas británicas mataron a 400 manifestantes hindús.
Murió en Santiniketan en el Birbhum, distrito de Bengala Occidental, India, el 7 de agosto de 1941.
También de Rabindranath Tagore en este blog:
«Rabindranath Tagore: Soledad»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: El último viaje»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: Pájaros perdidos»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: El último trato»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: El hogar»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: El revolucionario bengalí»: AQUÍ
«Rabindranath Tagore: Se como el sándalo»: AQUÍ
2 Comments
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: “Qué pequeña eres brizna de hierba. Sí, pero tengo toda la Tierra a mis pies.” RT “Pájaros perdidos” 1 Pájaros perdidos de verano vienen a mi ventana, cantan, y se van volando. Y hojas amarillas de otoño, que no……
[…] “Rabindranath Tagore: Pájaros perdidos”: AQUÍ […]