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Theodoor Rombouts
Nació en Amberes, Bélgica, el 2 de julio de 1597.
Pintor barroco de la Escuela Flamenca de Amberes, conocido sobre todo por sus escenas de género, aunque realizó así mismo pintura religiosa y algunas de tema mitológico.
Se formó a partir de los once años de edad con el pintor Abraham Janssen, decano del Gremio de San Lucas en Amberes, que ejercería una fuerte influencia en sus primeras obras, como se puede comprobar en su «Céfalo y Procris», actualmente albergado en el Museo de L’Hermitage de San Petersburgo.
A partir de 1616 y hasta 1625 residió en Italia, tiempo en el que trabajó al servicio de Cosme II de Médicis, Gran Duque de Toscana.
La mayor parte de su estancia italiana la pasó en Roma, aunque probablemente antes pasó por Florencia, hecho aquel, documentado desde 1620 por su inscripción en la parroquia de Sant’Andrea delle Fratte, a la que también pertenecían otros artistas flamencos en ese momento residiendo en la capital italiana.
En la citada ciudad entabló contacto con el pintor Bartolomeo Manfredi, pintor que rehuía los temas sublimes para retratar escenas de la vida cotidiana, y su grupo, todos seguidores de Caravaggio, circunstancia que marcaría su estilo el resto de su carrera.
De ese tiempo son obras como «El concierto», de 1622, actualmente en la Galería Nacional de Arte Antiguo de Roma.
A su vuelta a Amberes ingresó en el Gremio de San Lucas como maestro independiente, aunque se encontraría con el ambiente dominado por la pintura del gran maestro Rubens, bajo cuya influencia fue aclarando su paleta, aunque sin perder la influencia tenebrista que traía de Italia.
Abrió su taller del que salieron sus conocidas escenas de género, para las que tuvo pronto numerosos encargos.
En sus telas aplicó fuertes contrastes de la luz, con figuras a las que dotó de una gran expresividad, de aspecto vigoroso, naturalidad en sus gestos y monumentalidad, detalles que harían de él, el más importante seguidor caravaggista flamenco en su tiempo.
Así mismo vemos como en estas escenas, la composición de las figuras está dispuesta en diagonal, y ejecutadas en «repoussoir», (aplicación de tonos fuertes en el primer término de un cuadro, para aumentar la sensación de distancia respecto a los demás).
Son especialmente notables sus cuadros apaisados, dos de ellos podemos verlos en la colección permanente del Museo del Prado de Madrid: «El charlatán sacamuelas» y «Jugadores de naipes».
Comenzó a alternar con más frecuencia su pinturas de género con escenas religiosas, siendo especialmente notables «Cristo expulsando a los mercaderes del templo», «La Sagrada Familia», en la que contó colaboró realizando el paisaje, Jan Wildens y «la Negación de San Pedro».
A partir de 1630, debido al menor interés por el claroscuro caravaggista, abandonó los fuertes contrastes de luces, haciéndolas más difusas, aproximándose a la etapa más tardía de Pedro Pablo Rubens.
Son escasas sus obras conservadas, la mayor parte de su época más madura, en la que ya era un respetado miembro del Gremio de San Lucas de su ciudad natal, del que fue decano entre 1628 y 1630.
Murió en Amberes, el 14 de septiembre de 1637.
*Entrada actualizada y ampliada el 2 de julio de 2022.
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