Clic en la imagen para ver más obras
Tobeen
Félix Élie Bonnet, nombre real de Tobeen (anagrama lúdico de Bonne, seudónimo con el que firmó sus obras y su correspondencia, y así le llamaron sus amigo), nació en Burdeos, Francia, el 20 de julio de 1880.
Aunque nació en Burdeos, pasó gran parte de su vida en residió en el País Vasco español, por lo que, y debido a su frecuente referencia a temas vascos en sus pinturas, se hizo conocido como un artista vasco.
Muy joven aprendió el oficio de decorador y grabador en madera en el taller de su padre y su tío. Asimismo, inició su aprendizaje en el taller del artista y pintor bordelés, Émile Brunet; se puede decir que aunque siguiendo una formación, es autodidacta.
A semejanza de Albert Marquet y Odilon Redon, dejó Burdeos para instalarse en Paris, donde entró en contacto con pintores a los que pronto se les llamaría cubistas, como le contaría en su correspondencia a su amigo, el artista y pintor André Lhote que todavía vivía en Burdeos.
Los dos pintores se implicaron en la renovación de las artes plásticas, como se plasma en la obra de Tobeen, Estanque en el parque, de 1913.
A partir de 1910 trabajó en París donde mantuvo relaciones de amistad con el círculo de Pablo Picasso y Georges Braque y con el grupo de los hermanos Duchamp (Gaston, Raymond y Marcel) en Puteaux.
A partir de este momento, realizó obras influenciadas por este movimiento, pero pronto encontró su propio estilo: el realismo poético. No obstante, la huella del cubismo permanecerá en su obra.
Sus pinturas, dibujos y tallas en madera, nos muestran las huellas de su período parisino y su pasión por la poesía en la vida humana.
Expuso once obras en el Salon de la Section d’Or, celebrado en la Galerie La Boétie, París, en octubre de 1912.
Después sus obras se expondrán en numerosas galerías y salones.
Trabajaba de forma muy lenta, dejaría sólo unas 300 obras, en su mayoría pinturas, algunos grabados en madera, acuarelas y dibujos.
No obstante, su importancia ha sido reconocida por grandes marchantes de arte, holandeses, entre otros. Sus obras forman parte de colecciones de museos franceses, americanos y holandeses.
Pero no era un urbanita, amaba la vida en libertad, el mar, los bosques… y en 1920 se instaló en Saint-Valery-sur-Somme.
Murió en Saint-Valery-sur-Somme, el 14 de marzo de 1938.
No Comments