
«…Ahora qué miedo inútil, qué vergüenza
no tener oración para morder,
no tener fe para clavar las uñas,
no tener nada más que la noche,
saber que dios se muere, se resbala…»
Recordando a Mario Benedetti en el cuarto aniversario de su muerte.
«Alguien»
Alguien limpia la celda
de la tortura
que no quede la sangre
ni la amargura




