Poesia

Juan Gil-Albert: Los muchachos

abril 1, 2014


«No puedo sino amaros
estrujando vuestras veleidosas acechanzas
sobre mi pecho estremecido,
porque ¿de qué otra cosa podría vivir?..

JGA

Recordando al poeta alicantino en el 110º aniversario de su nacimiento

«Los muchachos»

Homenaje a Porfirio Barba-Jacob

Me veo precisado a repetirlo
una vez más: mis solos compañeros
de ruta y lecho: jóvenes que fuisteis
mi tentación más firme y el encanto
de mi flaqueza. Debo repetirlo
por última verdad: os amé a todos
cual si fuerais el mismo y el distinto
que cada vez mostrábase a la vista
como un primaveral brotar de nuevo:
fuisteis David, Tobeyo, Albano, Cinthio,
y aquél que no durmió nunca en mis brazos
pero supo decirme como nadie
que me quería. Espectros redentores
de mi corporeidad, númenes vivos
de mi pasión, tormentas fugitivas
de mi buen tiempo. Chicos azarosos
que con vuestras muchachas e inquietudes
cumplíais vuestro sino dando el pecho
a toda adversidad y pregonando
la frágil dicha, el sueño interrumpido,
lo duro que es vivir aun siendo joven
y la mucha energía que se gasta
en tratos baladíes. Pero entonces,
como quien oye a Dios o algún maestro
que suele aparentar su misma calma,
veníais a buscar en mi clemencia
el resplandor difuso de mi sombra
rodeada de sol como un gran árbol
que nos acoge en sí y que nos preserva
de no sabemos qué, muchachos míos,
de no sabemos qué. ¡Qué más quisiera
que haberos preservado eternamente
de vuestra soledad originaria,
de vuestro desconcierto! Nunca pude
sino disimular mi limitada
zona de luz, lo poco que tenía,
para que sustentáramos unidos
esta gravitación de la existencia.
Pero os he sido fiel y eso me salva.
Estaban bien dispuestos los altares
en los que colocaba cada noche
vuestra imagen triunfal con su avecilla
de temblorosa luz. y aun cuando a veces
la soledad rociaba con ausencias
mi corazón, presagios eran siempre
de una nueva deidad que se avecina,
y pronto dibujábase en la mente
un inédito rostro que aportaba
con el sueño pasado la extrañeza
de un nuevo amanecer: constancias mías
de la cambiante forma que me disteis.
Así quiero que conste en mis palabras
lo que es verdad y nadie desvaríe
cuando quiere emplear la suficiencia
y hablar de lo que ignora. Sólo sabe
quién es quien se hace dueño de sí mismo.
Yo soy quien os amó. Vosotros fuisteis
los órganos florales de mi suerte.
y ahora que ya no estoy sobre la tierra
y que en hombres vosotros convertidos
añoráis algún día la fragancia
de lo que se extinguió, sabedme siempre,
dispuesto a recrear no importa dónde, !
no importa con qué nuevo compañero,
la evanescente forma prohibida,
este inútil contacto perdurable
que fue mi meta.

Juan Gil-Albert

Juan de Mata Gil Simón, nombre real de Juan Gil-Albert Simón, nació en Alcoy, Alicante, el 1 de abril de 1904.
Poeta y ensayista, vanguardista y surrealista en sus inicios, poseedor de un gran y cuidado estilo, se muestró más comprometido con la realidad de su tiempo a raíz de su experiencia durante la Guerra Civil española y el exilio, de 1939 a 1947 en México y Argentina.
Regresó a Valencia en 1947, viviendo un exilio interior, por lo que algunos críticos lo consideran un miembro descolgado y aislado de la Generación del 27′.
Murió en Valencia, el 4 de julio de 1994.

También de Juan Gil-Albert en este blog:

*La imagen es de Henry Scott Tuke

«Juan Gil-Albert: El lujo»: AQUÍ

«Juan Gil-Albert: Las lágrimas»: AQUÍ

«Juan Gil-Albert: Sobre unos lirios, de Las ilusiones»: AQUÍ

«Juan Gil-Albert: Las violetas»: AQUÍ

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No Comments

  • Reply Bitacoras.com abril 2, 2014 at 1:26 am

    Información Bitacoras.com

    Valora en Bitacoras.com: “No puedo sino amaros estrujando vuestras veleidosas acechanzas sobre mi pecho estremecido, porque ¿de qué otra cosa podría vivir?…” JGA Recordando al poeta alicantino en el 90º aniversario de su nacimiento “Los m…

  • Reply Mi recuerdo a Juan Gil-Albert: Las mentiras » Trianarts marzo 31, 2015 at 11:07 pm

    […] “Juan Gil-Albert: Los muchachos”: AQUÍ […]

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