Ludovico Cardi de Cigoli: Los inicios del Renacimiento

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Ludovico Cardi de Cigoli

Nació en Villa Castelvecchio di Cigoli, San Miniato, en la región de La Toscana, lugar del que tomó el nombre por el que sería conocido, en 1559.

Pintor y arquitecto estuvo activo en las postrimerías del manierismo y el nacimiento del barroco.

Se educó y desarrolló gran parte de su carrera en Florencia, y pasó los últimos nueve años de su vida en Roma.

Inicialmente se formó en Florencia junto con el manierista Alessandro Allori; posteriormente fue influenciado por los más importantes pintores de la corriente opuesta, la llamada «Contra-Maniera», encabezados por Santi di Tito y Barocci, Cigoli se liberó delas ataduras del manierismo, dotando a su obra posterior de un expresionismo que no fue usual en la pintura florentina del siglo XVI.

Su mecenas fue el romano Massimo Massimi, para el que pintó un Ecce Homo, albergado actualmente en el Palazzo Pitti.

Se cuenta que Massimi le hizo un encargo con el mismo tema a otros dos importantes artistas de ese momento, Passignano y Caravaggio, sin que ninguno de implicados lo supiera. Esto no está documentado y no parece probable.

La pintura de Cigoli parece de factura influenciada por el Ecce Homo de Caravaggio, aunque el trabajo de Cigoli no posee el poderoso naturalismo caravaggista; el fondo en sombras y el primer plano despejado demuestra lo mucho que aquel se alejaba del estilo atiborrado de las pinturas históricas florentinas.

Siglos más tarde, esta obra fue llevada al Museo del Louvre por Napoleón Bonaparte, pero fue restituida a la ciudad de Florencia en 1815.

Uno de sus primeros trabajos fue «Caín matando a Abel»; gracia a él logró que le fueran encargados algunos trabajos para el Palacio Pitti, del Gran Duque, donde pintó «Venus y el Sátiro» y «El sacrificio de Isaac».

Otras de sus obras más de su época romana son «San Pedro curando a un leproso», actualmente en la Basílica de San Pedro; «La conversión de San Pablo», en la Basílica de San Pablo Extramuros; y «La historia de Psique» pintada al fresco dentro del proyecto decorativo de la Villa Borghese.

En Florencia pueden encontrarse «El martirio de Esteban», obra que le granjeó el nombre de «El Correggio florentino»; «Los estigmas de San Francisco», y «El caballero de Malta», por encargo del Papa Paulo III.

Su último trabajo fue un fresco en la cúpula de la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma.

Se considera que la primera representación fidedigna de la luna fue realizada él. En el mencionado fresco de la cúpula de la Basílica de Santa María La Mayor en Roma, puede verse una pintura de la Virgen apoyada sobre una Luna, en la que son claramente visibles los cráteres. Esto es consecuencia de la relación que Cigoli mantenía con el astrónomo Galileo Galilei, quien en esa época experimentaba con el recientemente inventado telescopio.

Fue maestro de grandes pintores, como Cristofano Allori, Giovanni Biliverti, Domenico Fetti, Antonio Lelli, Aurelio Lomi, Pietro Medici, Gregorio Pagani, y Andrea Comodi.
Murió en Roma en 1613.

*Entrada publicada en este blog el 17 de agosto de 2011. Ha sido actualizada y ampliada el 26 de junio de 2019.