«El poeta nombra las estrellas; el filósofo, el cielo; el teólogo, a sus dioses; el científico, las galaxias. Todos miran hacia
arriba, pero ninguno de ellos hace otra cosa que señalarse a
sí mismo.»
CHM
«La orina de los hombres»
1
Suave deslizarse del tren en las vías. Como
peinando cabellera. Larga. Lisa. De reflejos pla-
teados. Suave. Ojos en la vía contigua. En un raíl.
Uno sólo. Hasta el mareo. Entonces elevarlos.
Hacia la extensión verde. Palida. Suave.