«… El Arte puro como Cristo exclama:
¡Ego sum lux et veritas et vita!…»
RD
Recordando al poeta modernista nicaragüense en el centenario de su nacimiento.
«Los cisnes»
A Juan Ramón Jiménez
¿Qué signo haces, oh Cisne, con tu encorvado cuello
al paso de los tristes y errantes soñadores?
¿Por qué tan silencioso de ser blanco y ser bello,
tiránico a las aguas e impasible a las flores?
Yo te saludo ahora como en versos latinos
te saludara antaño Publio Ovidio Nasón.
Los mismos ruiseñores cantan los mismos trinos,
y en diferentes lenguas es la misma canción.
A vosotros mi lengua no debe ser extraña.
A Garcilaso visteis, acaso, alguna vez…
Soy un hijo de América, soy un nieto de España…
Quevedo pudo hablaros en verso en Aranjuez….
Cisnes, los abanicos de vuestras alas frescas
den a las frentes pálidas sus caricias más puras
y alejen vuestras blancas figuras pintorescas
de nuestras mentes tristes las ideas obscuras.
Brumas septentrionales nos llenan de tristezas,
se mueren nuestras rosas, se agostan nuestras palmas,
casi no hay ilusiones para nuestras cabezas,
y somos los mendigos de nuestras pobres almas.
Nos predican la guerra con águilas feroces,
gerifaltes de antaño revienen a los puños,
mas no brillan las glorias de las antiguas hoces,
ni hay Rodrigos ni Jaimes, ni han Alfonsos ni Nuños.
Faltos del alimento que dan las grandes cosas,
¿qué haremos los poetas sino buscar tus lagos?
A falta de laureles son muy dulces las rosas,
y a falta de victorias busquemos los halagos.
La América Española como la España entera
fija está en el Oriente de su fatal destino;
yo interrogo a la Esfinge que el porvenir espera
con la interrogación de tu cuello divino.
¿Seremos entregados a los bárbaros fieros?
¿Tantos millones de hombres hablaremos inglés?
¿Ya no hay nobles hidalgos ni bravos caballeros?
¿Callaremos ahora para llorar después?
He lanzado mi grito, Cisnes, entre vosotros,
que habéis sido los fieles en la desilusión,
mientras siento una fuga de americanos potros
y el estertor postrero de un caduco león…
…Y un Cisne negro dijo: «La noche anuncia el día».
Y uno blanco: «¡La aurora es inmortal, la aurora
es inmortal !» ¡Oh tierras de sol y de armonía,
aun guarda la Esperanza la caja de Pandora!
Rubén Darío
De: Cantos de vida y esperanza, 1905
Recogido en: Rubén Darío – Poesías Completas
Aguilar Ediciones, 1952
Félix Rubén García Sarmiento, conocido como Rubén Darío nació en Metapa, Nicaragua, el 18 de enero de 1867.
Poeta, escritor, periodista y diplomático nicaragüense, fue el máximo representante del modernismo literario en lengua española, y quizá, el poeta que ha tenido una mayor y más duradera influencia en la poesía del siglo XX en el ámbito hispano, y es por ello llamado «Príncipe de las letras castellanas»
Para su formación poética fue determinante la influencia de la poesía francesa. En primer lugar, la de los románticos, y en especial Victor Hugo. Más adelante, fue decisiva la influencia de los parnasianos: Théophile Gautier, Leconte de Lisle, Catulle Mendès y José María de Heredia.
En cuanto a los autores de otras lenguas, sentía una profunda admiración por tres autores estadounidenses: Ralph Waldo Emerson, Edgar Allan Poe y Walt Whitman.
Su influencia fue inmensa en los poetas de principios de siglo XX, tanto en España como en América. Muchos de sus seguidores, sin embargo, cambiaron pronto de rumbo: es el caso de Leopoldo Lugones, Julio Herrera y Reissig, Juan Ramón Jiménez o Antonio Machado.
Llegó a ser un poeta muy popular, cuyas obras se memorizaban en las escuelas de los países hispanohablantes y eran imitadas por cientos de jóvenes poetas. Esto resultó perjudicial para la recepción de su obra. Después de la Primera Guerra Mundial, con el nacimiento de las vanguardias literarias, los poetas volvieron la espalda a la estética modernista, que consideraban anticuada y retoricista.
Murió en León, el 6 de febrero de 1916.
También de Rubén Darío en este blog:
«Rubén Darío: La rosa niña»: AQUÍ
«Rubén Darío: Los cisnes»: AQUÍ
«Rubén Darío: Marcha triunfal»: AQUÍ
«Ruben Darío: Los motivos del lobo»: AQUÍ
«Rubén Darío: Canto de esperanza»: AQUÍ
«Ruben Darío: A Margarita Debayle»: AQUÍ
«Rubén Darío: El Príncipe de las Letras Castellanas – Antología»: AQUÍ
Bibliografía poética:
Abrojos. Santiago de Chile: Imprenta Cervantes, 1887.
Rimas. Santiago de Chile: Imprenta Cervantes, 1887.
Azul…. Valparaíso: Imprenta Litografía Excelsior, 1888. Segunda edición, ampliada: Guatemala: Imprenta de La Unión, 1890. Tercera edición: Buenos Aires, 1905.
Canto épico a las glorias de Chile. Editor MC0031334: Santiago de Chile, 1887.58
Primeras notas, [Epístolas y poemas, 1885]. Managua: Tipografía Nacional, 1888.
Prosas profanas y otros poemas. Buenos Aires, 1896. Segunda edición, ampliada: París, 1901.
Cantos de vida y esperanza. Los cisnes y otros poemas. Madrid, Tipografía de Revistas de Archivos y Bibliotecas, 1905.
Oda a Mitre. París: Imprimerie A. Eymeoud, 1906.
El canto errante. Madrid, Tipografía de Archivos, 1907.
Poema del otoño y otros poemas, Madrid: Biblioteca «Ateneo», 1910.
Canto a la Argentina y otros poemas. Madrid, Imprenta Clásica Española, 1914.
Lira póstuma. Madrid, 1919.
No Comments