«…Hombres de todos los continentes
las balas aún decapitan las rosas
en los amaneceres de la ensoñación…»
DB
El poema que podéis leer a continuación, «Te agradezco Señor» , está lleno de orgullo, no hay queja o reclamo, es la celebración del cuerpo y la vida.
«Te agradezco Señor»
Te agradezco, Señor, que me hayas creado Negro,
que hayas hecho de mí
la suma de todos los dolores,
y puesto sobre mi cabeza, el Mundo.