George Grosz: Nueva objetividad y arte degenerado

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George Grosz

Georg Ehrenfried, que era su nombre real, nació en Berlín, Alemania, el 26 de julio de 1893.
Pintor  expresionista, estuvo unido a los movimientos Dadá y  Nueva Objetividad, de éste último fue uno de los más importantes representantes.

Se formó inicialmente en la Academia de Dresde, de 1909 a 1912, y posteriormente en la Academia de Artes y Oficios de Berlín, La Kunstgewerbeschule, de 1912 a 1917.

En esta última  tuvo como maestro a Emil Orlík.
En esa época se dedicó sobre todo al dibujo de viñetas para periódicos y revistas satíricas, utilizando para ello la caricatura.

Así mismo copió obras de los grandes pintores del Museo de Dresde, especialmente de Pedro Pablo Rubens.

En 1913 viajó a París, donde contactó con los artistas de la vanguardia de la capital francesa, sobre todo con cubistas y futuristas.

A la vez que estudiaba y admiraba las obras de Francisco de Goya que había en el Museo del Louvre,  de Toulouse Lautrec y de Honoré Daumier.

Durante esta época parisina su estilo evolucionó de forma importante, simplificó sus formas, con los que se ponía de manifiesto la influencia que había ejercido en él el cubismo y el futurismo, en menor grado, pero también del expresionismo, que estaba en pleno auge en Alemania.

En 1914 se alistó en el Ejército alemán para participar en la I Guerra Mundial, en un regimiento de granaderos de artilleria.

Fue licenciado en 1916,  al parecer por el shock psicológico que le produjo el frente, del que se recuperó en un Hospital Militar.´

Cuando comenzó de nuevo a pintar, simplificó en sus cuadros aún más sus  líneas, en las que quiso expresar el horror de la guerra.

El desplome moral que supuso la derrota prusiana dio paso al estilo que caracterizó su producción de los años siguientes.

En 1919 se afilió al Partido Comunista alemán; fue detenido por por participar en el Levantamiento Espartaquista liderado por Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht, siendo encausado y condenado en numerosas ocasiones por incitación al odio entre clases, ofensas al pudor e injurias al ejército.

Por todos estos hechos, sus pinturas del conjunto de la obra satírica sobre la sociedad alemana: «Dios con nosotros», fueron destruidas.
En 1920 se unió  al movimiento dadá.

Abandonó el Partido Comunista tras un viaje a Rusia en el que conoció a Lenin y Trotski, desilusionándose probablemente con el régimen soviético.

Sus cuadros de esos años, tienen base cubista y futurista, en los que mezcló fuentes artísticas aúlicas con iconografía popular.

Es así como su evolución fue de la caricatura a temas urbanos violentos y apocalípticos, claramente politizado.
Se integró en este época en el Movimiento Nueva Objetividad.

Sus dibujos, la mayoría acuarelas y tinta, retrataron la Alemania de la década de 1920.
En 1932, estando ya el nazismo en auge, su obra fue catalogada como arte degenerado, y apodado como «el bolchevique cultural número uno».

En 1933, tras acceder Hitler al poder, Grosz emigró a Estados Unidos, donde fue contratado como profesor en Nueva York, obteniendo la nacionalidad estadounidense en 1938.

Su obra americana es menos incisiva, a pesar de que intentó regresar de forma surrealista a sus gráficos despiadados.
Su pesimismo se acentuó tras el desencadenamiento de la II Guerra Mundial, manifestándolo de forma clara en muchos de sus óleos,  un ejemplo es: «The Survivor» de 1944.

En 1946 escribió su autobiografía que tituló: A Little Yes and a Big No (Un pequeño sí y un gran no).
En 1958 regresó a su Alemania natal, donde murió  tras una caída en Berlín, el 6 de julio de 1959.

En el Museo Reina Sofía de Madrid podemos ver varios de sus dibujos y en el Museo Thyssen Bornemisza de Madrid cinco obras del artista.

*Entrada publicada el 10 de junio de 2012. Ha sido actualizada y ampliada con más de cien nuevas obras, el 6 de julio de 2024.