Maestros del retrato: Joshua Reynolds

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Sir Joshua Reynolds

Nació el 16 de julio de 1723, en Plympton, Devonshire, Reino Unido.
Era hijo de un pastor protestante que desde muy joven mostró su talento artístico.

En 1740 comenzó a estudiar en el taller de Thomas Hudson, y tres años más tarde inició su carrera profesional como retratista.

Fue uno de los pintores ingleses más influyentes del siglo XVIII, iniciador del llamado «Gran estilo», movimiento que defendía la idealización de lo imperfecto.

Es uno de los grandes maestros del retrato en toda la historia del arte; fue uno de los primeros miembros de la Royal Society of Arts, durante el tiempo que permaneció en esta institución, animó el interés de esa sociedad por el arte contemporáneo.

Junto a Thomas Gainsborough, con el que tuvo una gran rivalidad, fundó la Royal Academy inglesa, como una organización escindida de la anterior, de la que sería su primer presidente.

En 1749 viajó a Roma, donde permaneció hasta 1752, tiempo durante el que así mismo visitó Florencia, Parma, Bolonia, Venecia y París.

Durante este tiempo estudio profundamente los más importantes monumentos de la antigüedad, las obras de Rafael Sanzio y Michelangelo Buonarotti, a la vez que dibujó numerosas obras de Tiziano, Tintoretto y Veronés.

En 1753, ya en Londres de nuevo muy pronto alcanza el éxito con sus retratos siendo requerido por una numerosa clientela para lo que necesita incontables ayudantes en su taller, según se puede comprobar en las notas que con todo detalle reflejan sus libros de cuentas.

Entabló una gran amistad con importantes miembros de la alta sociedad londinense, entre ellos: el Dr. Johnson, Oliver Goldsmith, Edmund Burke, Henry Thrale, David Garrick y la artista Angelica Kauffmann.

Retrató la la élite de la intelectualidad, la política, la burguesía y la alta aristocracia británica.

Para divulgar su obra, se sirvió de la edición de estampas con sus pinturas.

Bajo la influencia de ­Anton van Dyck y de Godfrey Kneller, varió la forma tradicional de los retratos británicos de la época, desarrollando la ejecución de estos, partiendo de las características del cliente, dotando en muchos casos sus figuras con detalles dramáticos  acercan el personaje a la pintura histórica.

En su técnica es dominante el clasicismo, con detalles rococó, y una paleta de colores  muy puros.

En muchos de sus retratos, más palpable en los que realizó de personas de su círculo de amistades, se aprecian detalles tenebristas que recuerdan los de  Rembrandt, sobre todo en cuanto a los aspectos psicológicos.

A las mujeres las representa de forma idealizada en casi todos los casos, las viste de forma teatral o las convierte en musas o diosas.
Fue nombrado caballero por el rey Jorge III en 1769.

En 1768, siendo ya su autoridad indiscutible, como decíamos se convierte en el primer presidente de la Royal Academy, donde realizó quince discursos entre 1769 y 1790, y en los que dictó sus ideas estéticas del neoclasicismo y sobre el arte en general, uno de sus postulados apuntaba: «… la invención, hablando con rigor, es poco más que una nueva combinación de esas imágenes que han sido previamente recogidas y depositadas en la memoria.»

Estas ideas que no mucho después tuvieron muchos detractores, numerosos estudiantes de la Academia abandonaron ésta por el enconsertamiento y rigidez que Reynolds exigía de estos artistas que se opusieron al maestro, nació entre otros el movimiento de los Prerrafaelitas

En su obra más madura, se decanta por un estilo menos académico, debido a la influencia, tras su viaje a Holanda y Flandes en 1781, de la escuela flamenca y de Pedro Pablo Rubens con el que contactó.

En 1789 perdió la vista de su ojo izquierdo.
Murió en su casa de Leicester Fields, Londres, el 23 de febrero de 1792. Fue enterrado en la Catedral de San Pablo de Londres.

Su obra está representada en los más importantes museos británico y de todo el mundo, entre ellos, la Tate Gallery, el Museo del Louvre, L’Hermitage de San Petersburgo, la Galería de los Ufizzi de Florencia y el Metropolitan de Nueva York.

En el Museo del Prado de Madrid alberga dos de sus retratos y el Museo Thyssen Bornemisza de Madrid un magnifico retrato de la condesa de Dartmouth.

*Entrada publicada el 16 de julio de 2014. Ha sido actualizada y ampliada el 23 de enero de 2022.